La actuación del docente de lengua y literatura no es ingenua, inocente o carente de marco referencial (siempre lo habrá, pero en muchos casos no tenemos consciencia de ello). De hecho, una mirada atenta y con propósito a nuestras actuaciones en aula inevitablemente pueden descubrir y sacar a la luz posicionamientos teóricos, enfoques explicables desde diferentes paradigmas y perspectivas teóricas. La tarea no es sencilla: debemos proveernos de las herramientas conceptuales y prácticas que propiciarán un trabajo de investigación con altos niveles de rigor y que nos deparé mayores posibilidades de comprensión acerca de lo complejo del sistema didáctico en el aula de lengua y literatura. En el siguiente enlace:
Carlos Lomas (busca información sobre este autor) nos presenta - desde la óptica del enfoque cominicativo- sus puntos de vista acerca de los propósitos de la enseñanza en esta área, el papel o rol del docente que asume el enfoque comunicativo, la importancia de leer críticamente, la redacción, la competencia comunicativa, entre otros.
Recomiendo su atenta lectura y, por supuesto, muchos comentarios.
¡Buen día!
Particularmente, me parece muy interesante el planteamiento realizado por Carlos Lomas en la entrevista sobre el enfoque comunicativo de enseñanza de lengua castellana; sobre todo, cuando expresa: "Aunar corrección, coherencia e imaginación es la utopía a la que debemos tender." Esto, haciendo alusión a la persistencia de las escuela en querer imponer a los estudiantes la ortografía como único criterio válido para la valoración de las producciones escritas de los alumnos, cuando en realidad la imaginación de cada uno de ellos les permite la obtención de creaciones más ricas a pesar de las deficiencias ortográficas, tal y como lo plantea el entrevistado: "...un escrito correcto no es necesariamente un buen escrito, mientras que un escrito incorrecto puede ser extraordinario desde un punto de vista comunicativo."
ResponderEliminarSaludos Cindy: Esta fue una de las ideas que llamó mi atención y, pienso que se debe asumir como un principio en los procesos de promoción y práctica de la escritura en educación secundaria. De hecho, predomina en este nivel, una práctica infame que consiste en "quitar o restar puntos" por ortografía y acentuación ortográfica, sin ni siquiera haberlo establecido como un criterio de evaluación. Por eso, cuando queremos que niños y jóvenes se animen a escribir atendamos, en los primeros momentos, más al proceso de escritura, del cual la corrección ortográfica es sólo una parte, que al producto.
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